Vehículos
Señales para saber que está pinchado sin tener que bajarse del carro
Este es una de las averías más comunes y puede desencadenar graves accidentes.
En el mundo de la mecánica automotriz, uno de los problemas más comunes, pero a menudo pasados por alto, es el pinchazo de una llanta. Reconocer las señales de que un neumático se encuentra perdiendo presión de aire o totalmente averiado puede evitar accidentes o maniobras que exijan de una alta pericia en carretera.
Cabe señalar que en la actualidad los autos traen diferentes tecnologías que permiten a los conductores avanzar con un pinchazo durante unos kilómetros más, hasta encontrar un sitio indicado para reparar el neumático; sin embargo, en ocasiones, es tal el daño que ha sufrido la llanta que no da tiempo para avanzar, pues al no tener nada de aire es imposible y perjudicial tratar de mover el auto.
Señales que indican que está pinchado
- Testigo en el tablero del vehículo: esta es una tecnología con la que no cuentan todos los carros y que está incluida en algunos modelos que cuentan con ciertos sensores especiales que se encargan de avisarle al conductor sobre el estado de presión de aire de las llantas; en este sentido, al detectar que uno o más neumáticos están por debajo de lo recomendado, ese elemento enviará una señal para activar un ícono en el tablero del carro.
- Conducción incómoda y vibraciones: tal vez esta es la forma más usual con la que los conductores se dan cuenta de que están pinchados, pues comienzan a sentir, en el timón, vibraciones que no son usuales. En ocasiones no se tiene certeza de qué es lo que está sucediendo y se intenta aumentar la velocidad, incrementando esta sensación. La recomendación es detener el vehículo en un lugar especializado para atender la situación.
- Ruidos extraños: el carro comenzará a hacer un ruido que no es normal sobre el costado en el que está ubicada la llanta averiada. A medida que el ruido avanza, la conducción será más difícil, pues la pérdida de aire complicará esta acción.
Problemas con la dirección: por más que esta cuente con los últimos avances tecnológicos, maniobrar el carro será complicado y el equilibrio del vehículo se verá afectado por completo. Esto no hay que echarlo de menos y hay que atender de inmediato la avería.
Desgaste irregular de las llantas: hay llantas que están averiadas, pero cuyo agujero es mínimo, permitiendo que esta siga siendo utilizado sin afectar el comportamiento del vehículo; pese a esto y a que esporádicamente el daño es arreglado con un reabastecimiento de aire, con el tiempo los neumáticos presentarán un gasto desigual, afectando la estabilidad del auto.
Inspección visual: no está mal que cada conductor revise, antes de poner en marcha el vehículo, el estado de las llantas; esto le podrá indicar si puede haber alguna falla en los neumáticos.