COVID-19 y el milagro metabólico: los secretos de la medicina funcional

En medio de esta coyuntura de la covid-19, los médicos y demás personal de la salud son la primera primera línea en la lucha contra el mortal virus. El trabajo de este personal ha incrementado drásticamente en el último año y, hoy en día, más con el avance del tercer pico. Son los médicos quienes investigan y ayudan, junto a las dosis anticovid, a reducir los decesos. Sin embargo, algunos expertos en el área optan por confiar y creer en métodos poco convencionales, algo más ligado a la medicina funcional.

La pasión del doctor Carlos Jaramillo por encontrar la cura de raíz de las enfermedades crónicas lo ha convertido en uno de los expertos más reconocidos de la medicina funcional en Latinoamérica. De hecho, este personaje asegura firmemente que para superar la pandemia no debemos confiarnos exclusivamente de las vacunas.

Pero entonces, ¿cómo hacerle frente a estos agentes mortales que han cobrado la vida de millones de personas? Para este profesional en medicina es fundamental mantener hábitos de vida saludables. “Llevamos un año sabiendo que este virus le prende candela a las personas, y si las personas tienen dinamita alojada en su cuerpo se las va a cobrar muy caro, en cuidados intensivos o muriendo. Y esa dinamita está causada por los malos hábitos. Cerramos los gimnasios pero abrimos los casinos”, afirma Jaramillo.

Aunque muchos lo categoricen como una persona alternativa, sobrenatural, e incluso hippie, este profesional de la Universidad de la Sabana, certificado en Medicina Funcional por el Institute of Functional Medicine de Estados Unidos, especialista en Cirugía y Nutrición Clínica; y en Bioquímica y Fisiología Clínica de las universidades de Yale y Harvard, lo que le interesa es atender a sus pacientes y educarlos con una orientación hacia la búsqueda de un estilo de vida realmente saludable, fortaleciendo la defensa número del cuerpo humano: el sistema inmunológico.

Hoy en día, Carlos es uno de los médicos funcionales más reconocidos en América Latina. También es médico cirujano, especialización que optó por dejar de lado, así como lo hizo con los métodos tradicionales.

“Cuando me gradué, cuando empecé a estudiar cirugía, ya estaba haciendo especialización y empecé a darme cuenta de muchos intereses que tenía, especialmente por la nutrición. Pero también me hice muchos cuestionamientos acerca de la forma como se hace medicina, por la forma como concebimos el concepto de medicina, y fue ahí cuando hice un alto, dije “bueno no, no voy a volver a operar”, ser cirujano no es lo que quiero, porque en el sistema en que está inmerso no es el sistema donde yo quiero estar. Yo quiero algo diferente”.

Su decisión ha provocado muchas críticas a lo largo de su carrera. Muchos colegas son escépticos a sus tratamientos, “hay algunos a los que les sabe mal lo que hago, lo que digo, porque se sale de las cosas tradicionales”, cuenta Carlos. Pero más allá de eso, él protege a escudo y espada sus conocimientos, aquellos que han dado resultado y han permitido que sea conocido como uno de los doctores más brillantes en esta rama alternativa de la medicina.

También se ha encontrado con colegas que dicen que su medicina funcional no existe y “les quiero decir que sí que es verdad, la medicina funcional no existe. Pero no existe no porque no sea una especialidad avalada en Colombia o una especialidad avalada en Chile, es porque ninguna medicina existe, todas son una creación en nuestra mente”, comenta el experto.

En forma de respuesta a esas críticas, trae a colación la fama que tiene la medicina vegetal y la medicina natural que se ha hecho por miles de años por los chinos; y lo que se lleva haciendo hace unos cinco mil años en India.

Asimismo, las personas que creen en sus métodos también son muchas. Entre sus libros está El milagro metabólico, su obra más vendida con más de 200.000 ejemplares comercializados en todo el mundo, siendo éste el texto más vendido en 2019 y 2020 en Colombia.

Carlos comenta que sus obras, sus publicaciones en redes, son una plataforma para que cada vez más personas aprendan a sanarse a sí mismos. Y confiesa que su experiencia personal lo llevó a eso. Este médico sufrió por más de 12 años de gastritis, hasta que se curó a través de la medicina funcional.

“Partamos de una base yo era absolutamente cerrado, cuadriculado no creía en nada si no en el bisturí en mis manos y en las de algunos de mis profesores. Todo era “muéstrame la evidencia, muéstreme el artículo”, me aprendía hasta el último artículo porque creía que eso era. Entonces yo no juzgo a nadie que hoy me juzgue, porque yo hacía lo mismo. El que se saliera de la línea uno decía “este es mucho payaso”. Yo era el payaso, yo me veía a mi mismo hace 10 años como un payaso”, recuerda.

Finalmente, este experto afirma que es un convencido de que la salud se daña en casa pero también se corrige en casa. Con respecto al coronavirus, dice que es un agente que llega a un mundo enfermo.

“Está absolutamente demostrado que las personas que más han fallecido en el mundo entero son las personas que han tenido enfermedades crónicas y son las enfermedades crónicas causadas por los malos hábitos. Entonces hay que vacunarse, claro, por supuesto”, dice. Pero también menciona que el poder está en el sistema inmunológico y así es como deberían enfrentarse las enfermedades antes, durante y después de que aparezcan en nuestro cuerpo.