Vida Moderna
Ojo: este es el primer síntoma de un cáncer de páncreas
Esta enfermedad en sus primeras etapas es silenciosa.
El cáncer de páncreas es una enfermedad que avanza sin mostrar señales. El instituto de investigación Mayo Clinic asegura que normalmente comienza en los tejidos de este órgano, que se encuentra ubicado detrás de la parte inferior del estómago. El páncreas libera enzimas que ayudan en el proceso digestivo y produce hormonas que contribuyen a controlar la glucosa sanguínea.
Se pueden presentar varios tipos de tumores en el páncreas, incluidos los cancerosos y no cancerosos. El tipo más común de cáncer en esta área comienza en las células que recubren los conductos que transportan las enzimas digestivas fuera del páncreas y se le conoce como adenocarcinoma ductal pancreático.
El cáncer de páncreas rara vez se detecta en sus etapas iniciales, cuando es más curable. Esto se debe a que con frecuencia no causa síntomas hasta después de que se ha diseminado a otros órganos.
Síntomas a los que se debe prestar atención
Sin embargo, hay señales a las que se les debe prestar atención, porque normalmente indican que ya la enfermedad está avanzada. Estos son los más relevantes.
- Dolor abdominal que se irradia hacia la espalda.
- Pérdida de apetito o pérdida de peso involuntaria.
- Color amarillento en la piel y en la parte blanca de los ojos (ictericia).
- Heces de color claro.
- Orina de color oscuro.
- Picazón en la piel.
- Diagnóstico reciente de diabetes o diabetes existente que se vuelve más difícil de controlar.
- Coágulos sanguíneos.
- Fatiga.
Factores de riesgo
- Fumar.
- Tener mucho sobrepeso.
- Tener antecedentes personales de diabetes o pancreatitis crónica.
- Tener antecedentes familiares de cáncer de páncreas o pancreatitis.
- Presentar ciertas afecciones hereditarias, como las siguientes: síndrome de neoplasia endocrina múltiple de tipo 1, cáncer de colon sin poliposis hereditario y síndrome de melanoma familiar con lunares atípicos múltiples.
Complicaciones de la enfermedad
A medida que el cáncer de páncreas evoluciona, puede causar complicaciones como las siguientes, indica Mayo Clinic.
- Pérdida de peso: varios factores pueden causar la pérdida de peso. Se puede dar a medida que el cáncer consume la energía del cuerpo. De igual forma, las náuseas y los vómitos generados por los tratamientos contra el cáncer o por un tumor que presiona el estómago pueden dificultar la ingesta de alimentos.
- Ictericia: el cáncer de páncreas que bloquea el conducto biliar del hígado puede causar ictericia. Los signos incluyen piel y ojos amarillos, orina de color oscuro y heces fecales de color pálido. La ictericia generalmente ocurre sin dolor abdominal.
- Dolor: un tumor en crecimiento puede presionar los nervios del abdomen, y causar dolor que puede llegar a ser intenso. Los analgésicos ayudan a sentirse más cómodo. Los tratamientos, como la radiación y la quimioterapia, contribuirían a retardar el crecimiento del tumor y proporcionar algún alivio del dolor.
- Obstrucción intestinal: el cáncer de páncreas que crece o presiona la primera parte del intestino delgado (duodeno) puede bloquear el flujo de alimentos digeridos desde el estómago hacia los intestinos.
¿Cómo prevenir el cáncer de páncreas?
Hay factores que pueden ayudar a prevenir el desarrollo de esta enfermedad. Por ejemplo, dejar de fumar. Este hábito es el factor de riesgo más importante y evitable del cáncer de páncreas, precisa American Cancer Society.
La alimentación también es clave, así como mantener un peso saludable. Esto sumado a la práctica de actividad física de manera regular.
La mencionada fuente asegura que las carnes rojas y procesadas y las bebidas azucaradas pueden aumentar el riesgo de cáncer de páncreas. Los especialistas recomiendan seguir un patrón de alimentación saludable que incluya muchas frutas, verduras y granos enteros (integrales), y que limite o evite las carnes y alimentos altamente procesados.
El consumo excesivo de alcohol ha estado vinculado al cáncer de páncreas en algunos estudios. Este hábito puede derivar también en afecciones, como pancreatitis crónica, que aumenta el riesgo de desarrollar esta enfermedad.