¿Qué raza de perro es mejor para acompañar a una persona con discapacidad?

Las mascotas no solo tienen la misión de acompañar a sus amos; también hay algunas que son educadas y criadas para prestar un tipo de servicio que permite ayudar a las personas con discapacidad a tener una mejor calidad de vida y a desempeñar sus tareas diarias de forma regular.

En este sentido, hay algunas razas de perros que, por su inteligencia, su carácter, su físico y su capacidad para entender instrucciones, son utilizados por algunas organizaciones que se dedican a entrenarlos para ayudar a personas con ceguera, movilidad reducida, discapacidad cognitiva, autismo y hasta epilepsia.

Lo primero que hay que hacer en estos casos no es definir la raza del perro, sino la discapacidad que se busca atender, pues según ella, se puede elegir el tipo de perro y hasta de mascota que se puede entrenar para ayudar al paciente.

Razas de perros para personas con discapacidad

Hasta el momento, diferentes expertos en entrenamiento de perros se han dedicado a educar a estos animales para que puedan prestar servicios de asistencia a personas con discapacidad; sin embargo, no todas las razas funcionan igual, pues hay algunas que tienen mejores capacidades que otras y que por ende se desenvuelven mejor en ciertos campos.

Las razas más utilizadas para estos fines son aquellos que además de demostrar una mayor inteligencia, tienen especial sensibilidad para percibir señales o sonidos y que tiene temperamentos muy dóciles donde se consideran muy poco agresivos.

En ese orden de ideas, estas son las razas que los expertos recomiendan para ser perros de asistencia y acompañamiento para personas con discapacidad:

• Golden retriever
• Labrador retriever
• Pastor belga malinois
• Alaskan malamuten

¿Qué tipo de discapacidad pueden atender?

Hay varios tipos de discapacidad en las que estos perros de asistencia pueden ayudar:

• Discapacidad física: en este campo, los perros están entrenados para ayudar a recoger objetos, levantar cosas del suelo, abrir y cerrar puertas y prender y apagar luces. Así mismo, tiene capacidades extraordinarias para moverse por la casa de su amor de manera tranquila, sin hacer daños y atendiendo las instrucciones de la persona.
• Discapacidad auditiva: estos perros son demasiado inteligentes y son capaces de indicarle a su amo cuando algún elemento está emitiendo un sonido como teléfonos, alarmas, timbres, voces y hasta el llanto de un bebé. Están entrenados para dirigir a las personas al lugar desde donde se está produciendo el ruido.
• Discapacidad visual: hay quienes los llaman perros guía o utilizan el término lazarillo para referirse a ellos, aunque esté mal empleado. Son capaces de aprender los recorridos que realizan estas personas y le indican cuando debe detenerse, cuándo hay un obstáculo, dónde sentarse y otras funciones que le permiten al ciego moverse con facilidad.
• Epilepsia: hay perros que son entrenados para poder detectar cuando un niño o una persona va a sufrir un ataque de epilepsia; en este caso pueden avisar a un familiar en casa sobre lo sucedido y también se ubican en el suelo debajo de su cabeza para evitar que se golpee y se ocasione una lesión grave.

• Autismo: son perros de compañía que ayudan a las personas con autismo a corregir las conductas típicas de este síndrome y a través del vínculo y el afecto que establecen con sus dueños, ayudan a mejorar la comunicación, su capacidad de socializar, su autoestima y seguridad, y su desarrollo sensorial.
• Terapia asistida: en este punto los animales son los indicados de ayudar a personas con discapacidad cognitiva, personas mayores, drogodependientes, o con enfermedades mentales a realizar terapias para ayudarlos a mejorar en un objetivo puntual; la idea es reforzar el vínculo animal -paciente, para ayudar con el objetivo de las terapias planteadas.