Helados caseros para preparar desde la comodidad de la casa

El verano y el calor se asocian, sin ningún lugar a dudas, a los helados. Un alimento tan refrescante como delicioso que hace las delicias de los más pequeños de la casa, pero también de los adultos. Y es que, ¿quién se resiste a un helado?

Sin embargo, muchas veces es un producto que se intenta evitar si se quiere mantener un peso equilibrado, ya que este dulce capricho suele contener un elevado número de calorías y un alto contenido de azúcar.

Pero no siempre es así, por el hecho de que se puede disfrutar de manera ocasional y sin remordimientos de conciencia haciendo helados de frutas en casa, saludables, bajos en calorías y de un excelente sabor.

Además, son recetas sencillas que se pueden hacer con los más pequeños de la casa, un plan de lo más especial y entretenido que generara un momento de unidad entre la familia.

El portal Agendadeisa menciona algunas recetas delicias para toda la familia con diferentes alternativas refrescantes y sanas en las que la fruta es la gran protagonista, por ende pueden ser consumidos por toda los miembros de la familia.

Helado de fresa y banano

Un sabor clásico con tan solo tres ingredientes, todos ellos naturales. Es mezclar en un bowl un banano maduro picado en trozos, diez o doce fresas cortadas por la mitad y 120 ml de zumo de piña o naranja. Batir la mezcla con una batidora y verterla en unos moldes de silicona que se pueden encontrar en numerosos comercios o almacenes de cadena.

Una vez hecho esto, hay que colocarle un palito de madera en cada molde y congelarlos durante toda la noche o como mínimo de seis a ocho horas.

Helado de piña y mango

Lo primero que se debe hacer para preparar este delicioso helado es pelar y porcionar un mango y media piña, y congelarlos durante unas horas. A continuación, colocar los ingredientes en un bowl con 400 ml de zumo de piña y triturarlo todo bien, hasta obtener una mezcla homogénea.

Verter en los moldes, sin olvidar los palitos, e introducirlos en el congelador durante al menos seis horas antes de disfrutarlos.

Helado de sandía y kiwi

Para hacer estos helados se necesitará una buena cantidad de sandía y kiwi esta variará dependiendo de la cantidad de helados que se quieren hacer.

Primero, hay que retirar la corteza de media sandía, cortarla en cubos y quitarle las semillas. A continuación, licuarlas o triturarlas con una batidora y verter el zumo de sandía sobre los moldes, hasta llenar dos terceras partes de cada uno. Colocar un palito en cada molde y dejarlos en el congelador hasta que estén duros (unas dos horas).

Mientras tanto, pelar y cortar tres kiwis en rodajas, colocarlas en la licuadora y triturarlas. Si se quiere se le puedes añadir algo de azúcar, en función de los gustos. Añadir el endulzante si se desea y volver a introducirlo unas horas en el congelador los moldes con la mezcla.

Helado de yogur y fresa

A las personas que son fans del petit suisse les encantará esta variedad de sabores. Mezclar en un bowl 500 g de fresas lavadas, sin hojas y troceadas, 250 g de yogur griego, 50 g de miel y una cucharada de zumo de limón. Pasarlo por la batidora hasta que esté suave y verterlo sobre los moldes. Colocar los palitos y refrigerarlos durante al menos cuatro a cinco horas.

Consumo de frutas

Los profesionales de la salud mencionan la importancia de incluir las frutas dentro de la dieta; como mínimo, estas se deben ingerir tres veces al día. Se pueden consumir en el desayuno, en la merienda de la mañana y en la de la tarde, y lo más recomendado es que se ingieran en su estado natural.

*Con información de Europa Press.